LA ESCUELA DE LA VIDA

Hace unos años, en el desierto del Sahara, me acuerdo perfectamente, del momento en el que preguntaba a nuestros compañeros bereberes con quien hacíamos la excursión para acampar, como sabían tantos idiomas.

Ellos me contestaron: -de la escuela de la vida amigo.

¿Qué es la escuela de la vida?

La escuela de la vida es dejarse llevar, es vivir y dejar vivir, es no aparentar, es ser tú mismo. Las experiencias, muchas veces nos muestran a nuestro verdadero yo, que a veces tanto nos cuesta encontrar.

En esta vida hay que hacer todas las cosas que uno pueda y quiera hacer, vivir su realidad y disfrutar aprendiendo. Es, en esos momentos, muchas veces fugaces, donde de verdad apreciamos lo que estamos viviendo pero esta sensación debería ocurrir siempre y no ser puntual.

Una vez que uno empieza el camino hacia la escuela de la vida es imposible parar. Miles de ramificaciones encontrarás, demasiadas decisiones y elecciones que dudarás, pero nunca debes arrepentirte, nunca puedes mirar hacia atrás, porque si lo haces, te caerás e irás mucho mas lento. No tengas miedo de lo que vayas a vivir, de lo que pueda pasar, porque es el misterio lo que provoca en nosotros esa sensación de emoción y nervios, los cuales te ayudan a continuar. Tu camino tiene un inicio y tendrá un final pero la clave no está en las metas sino en el trayecto a esos objetivos donde has de parar a evaluarte. 

En la escuela de la vida no hay limitaciones ni tampoco caminos prohibidos. Has de perderte para luego encontrarte. Viaja, se consciente en todo momento de lo que haces, trabaja, sueña, pero sobre todo experimenta. Siempre habrá tiempo para empezar, pero te aseguro querido lector, que una vez uno comienza a escribir su propio prólogo continuará y continuará... Y aunque a veces las cosas puedan salir mal, todo siempre pasa por algo y has de saberlo.

Y una última cosa! Tú vida es única y por ello tienes que vivirla tú mismo. Que nada ni nadie se interponga ni en tus metas ni en tus sueños.La escuela de la vida siempre mantendrá las puertas abiertas a cualquiera pero antes de entrar debes saber que todos los caminos llevan a Roma, es decir... a un final, un final del cuento en el que tú, eres el propio protagonista y de ti depende que se escriban aquellas historias que nos contaban esas personas que en su día conocimos y que sabíamos y sabemos que estaban locas, que no eran normales, pero que con toda certeza conocían por donde iban y lo que querían.

APROVECHA, QUE LA VIDA SON DÍAS!

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